ME DA MIEDITO

Bergara le huye al debate con Lema

-

Martín Lema tiró el guante y Mario Bergara se hizo el distraído. En un gesto de apertura democrática, el candidato de la Coalición Republicana para la Intendencia de Montevideo propuso un debate mano a mano con el aspirante del Frente Amplio. Pero Bergara, lejos de aceptar el desafío, se escudó en excusas y evadió el cruce de ideas.

“Estoy dispuesto a debatir y que quede absolutamente comprobado el contraste de modelos”, dijo Lema con claridad. Su propuesta fue directa: discutir frente a frente sobre la gestión de la capital, que lleva más de tres décadas bajo la batuta de la izquierda.

La respuesta de Bergara

Pero la reacción de Bergara fue digna de una retirada estratégica. Acusó a Lema y al Partido Nacional de promover una “enorme agresividad” y rechazó el intercambio. O sea, en vez de defender su modelo frenteamplista, el economista prefirió hablar de formas, no de fondo.

La negativa no sorprende si se observa el historial del Frente Amplio en Montevideo: promesas incumplidas, obras que no llegan y una ciudad cada vez más desordenada. Quizá Bergara simplemente no tiene respuestas convincentes para defender lo indefendible.

Lema, en cambio, apostó a la transparencia. No teme confrontar propuestas y poner en evidencia las fallas del modelo actual. Quiere hablar de limpieza, de transporte, de seguridad, de gestión eficiente. Bergara, por su parte, pareciera preferir los monólogos a los diálogos.

Este episodio deja claro qué tipo de liderazgo está dispuesto a asumir cada uno. Mientras uno busca el contraste de ideas y el ejercicio democrático, el otro se refugia en argumentos vacíos para evitar exponer sus debilidades. La ciudadanía merecía un debate real, no una huida calculada.

Montevideo necesita una sacudida. Y el primer paso es animarse a decir las cosas como son. Si un candidato no quiere debatir, ¿qué podemos esperar de su gestión?