En un escenario de presión constante por parte del gobienro, el balance financiero presentado recientemente por CASMU para el período finalizado en septiembre de 2024 destaca como un testimonio de la capacidad de la mutualista para mantener su estabilidad económica en circunstancias adversas y obliga al gobierno a repensar su posicionamiento frente a la mutualista.
La auditoría, realizada por la firma internacional Grant Thornton, confirma una ganancia de 25 millones de pesos en el último año. Si bien esta cifra refleja una disminución respecto a ejercicios anteriores —con ganancias de 104 millones en 2023 y 115 millones en 2022—, es importante considerar el contexto de presiones y hostigamiento en el que se lograron estos resultados. El informe también resalta la reducción del patrimonio negativo, que pasó de representar el 36% de los activos en 2019 a un 21% en 2024, marcando una mejora significativa en los indicadores financieros clave.
CASMU registró ingresos operativos por 13.308 millones de pesos en el último año fiscal, una cifra que refleja la robustez de sus actividades principales pese al desafiante contexto económico y político. Este desempeño destaca la capacidad de la mutualista para sostener su operación de manera eficiente, mientras enfrenta presiones externas y mantiene servicios esenciales para más de 200.000 afiliados.
Además, se aborda cómo los resultados financieros positivos de los últimos años, incluyendo ganancias netas, han ayudado a la institución a reducir su patrimonio negativo y mantener estabilidad.Grant Thornton, una de las firmas de auditoría y consultoría más prestigiosas a nivel mundial, opera en más de 140 países y es reconocida por su experiencia en evaluar la salud financiera de instituciones y empresas de diversos sectores. Su participación en este balance es interpretado por fuentes del gobierno como un signo de transparencia y rigurosidad que los obliga a reacomodar las fichas en la estrategia de relacionamiento con CASMU.
Este balance y sus cifras son reveladoras, especialmente frente a las críticas reiteradas por parte del Ministerio de Salud Pública (MSP) y las medidas tomadas que algunos califican como hostiles hacia la institución. En este contexto, es pertinente recordar el artículo publicado por Bo TV Noticias sobre el “hostigamiento contra CASMU“, donde se alertaba sobre el impacto negativo que podría generar una intervención mal gestionada en el Sistema Nacional Integrado de Salud.
Reducción de pasivos y gestión eficiente
El balance también revela una disminución en el pasivo total de CASMU, que pasó de 8.872 millones en 2023 a 8.591 millones en 2024, una reducción de 281 millones de pesos. Esta mejora se logró mediante la combinación de una disminución en el patrimonio negativo y una gestión prudente de los activos. A pesar de las dificultades, CASMU logró mantener sus niveles de ingresos operativos, alcanzando 13.308 millones de pesos.
El problema central que enfrentó la mutualista es el acortamiento en el plazo promedio de sus pasivos, lo que ha presionado sus indicadores de liquidez. A pesar de ello, la institución ha sabido adaptarse y evitar medidas que comprometieran su integridad, mientras sigue a la espera de una firma del gobierno para dar cumplimiento a la ley y continuar con el proceso de reconstrucción de la mutualista. Para más información ver la nota “BROU aprueba préstamo para CASMU con voto multipartidario: el gobierno lo sigue demorando“.
El rol del Estado y el respaldo legislativo
Un aspecto clave en la estabilización de CASMU fue la aprobación por parte del Parlamento de la garantía soberana, que permitió a la mutualista acceder a herramientas financieras cruciales. Este respaldo legislativo fue un factor determinante para reafirmar la confianza de afiliados y proveedores.
No obstante, la demora en la implementación de estas medidas ha generado sospechas sobre posibles intenciones de desestabilizar a la institución. Como señaló Bo TV Noticias en su artículo sobre los “fondos garantizados“, estas demoras podrían ser deliberadas y ponen en riesgo la sostenibilidad del sistema mutual.
Transparencia y garantías de futuro
El balance también deja en claro que la institución está comprometida con la transparencia. La auditoría externa valida la gestión económica y refuta las acusaciones de mala administración vertidas desde el MSP. Este balance, por su afán riguroso y profesional, contrasta con la forma “peculiar” con la que el MSP ha manejado los datos hasta el momento, resultando pertinente recordar los cuestionamientos planteados por Bo TV Noticias acerca de la credibilidad de ciertos informes oficiales, como el “grave error de tipeo del MSP” que comprometió un informe del MSP sobre la intervención en CASMU.
Cambio de estrategia
Tras la divulgación del balance positivo de CASMU, el gobierno se ha visto forzado a reconsiderar su postura hacia la mutualista. Según fuentes parlamentarias, se ha comenzado a debatir la necesidad de reducir la tensión con la institución, especialmente dado que el actual gobierno está en sus últimos meses de gestión. Con la inminente asunción de un nuevo gobierno del Frente Amplio en marzo, fuentes de la transición afirman que el cierre de una mutualista con balances positivos no es una opción viable. Asimismo, se ha confirmado una reunión programada para este miércoles entre la ministra de Salud Pública, Karina Rando, y su sucesora, Cristina Lustemberg, donde se abordará este tema. Desde el entorno de Lustemberg se advierte que lo más importante es que se llegue a una solución del tema CASMU con el menor impacto posible, teniendo en cuenta que la Institución elige sus autoridades democráticamente y las próximas elecciones están muy cerca, en el mes de setiembre de este año.
El rol del SMU
En esta controvertida situación también juega un rol el SMU, que en su momento dejó a CASMU con un patrimonio negativo de 100 millones de dólares tras su desvinculación. Las continuas presiones y la difusión de informaciones inexactas sobre supuestos problemas asistenciales en la mutualista han provocado varias inspecciones del MSP —la más reciente el 13 de enero de 2025—, las cuales confirman que la Institucion mantiene la calidad asistencial de acuerdo a las exigencias del MSP.