El presidente electo Yamandú Orsi afirmó que mantendrá su poder de veto “encerrado en una caja”, sugiriendo que evitará utilizar esta herramienta constitucional durante su mandato. Esta postura ha suscitado risas y dudas sobre su capacidad de liderazgo y autonomía en la toma de decisiones.
Un veto bajo llave
Durante una rueda de prensa, Orsi expresó su intención de no recurrir al poder de veto que la Constitución otorga al presidente. “Es un instituto que existe, pero yo prefiero ir por el otro camino, que es lograr los acuerdos necesarios para que las leyes salgan”, declaró. Además, enfatizó: “Prefiero tener [el veto] encerrado en una caja y no usarlo, porque habla de una falta de acuerdos, que ha pasado en varios gobiernos de distintos signos”.
Estas afirmaciones han sido interpretadas por algunos analistas como una señal de debilidad y falta de determinación para ejercer plenamente las facultades presidenciales. La herramienta del veto es esencial para que el Ejecutivo pueda contrarrestar decisiones legislativas que considere perjudiciales o contrarias a su programa de gobierno. Renunciar a su uso podría limitar la capacidad del presidente para defender sus políticas y principios.
¿Quién maneja los hilos?
La decisión de Orsi de “encerrar” su poder de veto ha generado especulaciones sobre la influencia de actores externos en su gestión. Algunos sectores sugieren que figuras prominentes del Frente Amplio, como el expresidente José Mujica, podrían estar ejerciendo una influencia determinante en las decisiones de Orsi, condicionando su autonomía como mandatario.
Esta percepción se ve reforzada por la trayectoria política de Orsi, quien ha sido considerado un discípulo cercano de Mujica. La falta de una postura firme respecto al uso del veto presidencial podría indicar una dependencia de las directrices establecidas por los líderes históricos de su partido, en lugar de una conducción autónoma y decidida.

Precedentes y comparaciones
Es relevante destacar que el actual presidente, Luis Lacalle Pou, ha utilizado el poder de veto en diversas ocasiones durante su mandato para frenar iniciativas legislativas que consideraba contrarias a los intereses nacionales. Por ejemplo, en diciembre de 2021, vetó la ley forestal propuesta por Cabildo Abierto y respaldada por el Frente Amplio. Asimismo, en agosto de 2024, vetó un artículo de la nueva ley de medios que imponía obligaciones controversiales a los medios de comunicación.
La disposición de Lacalle Pou para ejercer el veto contrasta con la postura anunciada por Orsi, generando interrogantes sobre cómo enfrentará situaciones en las que el Legislativo apruebe leyes que puedan ir en detrimento de su visión o del bienestar del país.